domingo, 4 de agosto de 2013

aferrarse a algo que ya no existe...

De pronto ocurre algo que te trastoca por completo. Se trata de una sensación casi imposible de explicar con palabras. Únicamente sientes que el clavo al que te aferrabas, ese clavo ardiente que ya ni si quiera está caliente, quizás ya no tenga sentido. ¿Por qué seguir empeñado en algo que ni si quiera te transmite un mínimo de calor? Y lo más importante, ¿porqué de pronto plantearse soltarlo? Tras varios meses aferrado a un clavo helado algo te deja paralizado y provoca un sentimiento agradable e inquietante. Incertidumbre. Duda. Soltarse o quedarse. Enfriarse o calentarse. He ahí la cuestión

No hay comentarios:

Publicar un comentario